Recién renovada en su totalidad, esta antigua casa de los Ramonetage (trabajadores del vino) le encantará por su aire antiguo modernizado. Se han conservado las baldosas de cemento y las puertas. Le encantarán los amplios espacios exteriores, con acceso a la piscina y a la barbacoa. El pueblo se encuentra a poca distancia a pie, con todos los servicios: panadería, bar/restaurante, farmacia, quiosco, etc. Las playas están a un cuarto de hora, al igual que ciudades como Béziers, Pézenas y Cap d'Agde. Todos los ingredientes para una estancia inmejorable